#1 Cheerfy Verse

El futuro de los restaurantes no son los robots.
Son los (super)humanos.


El drama de la crisis laboral.

El sector de la restauración es un negocio de personas. Sin embargo, la falta de personal se ha convertido en un reto importante. Tras el COVID-19, los restaurantes se enfrentan a la escasez de personal en un mundo en el que se demanda mayor flexibilidad y trabajo a distancia.

Según McKinsey, el sector de la hostelería en España -que suele emplear a uno de cada ocho trabajadores- ha comenzado el año 2022 con pocos recursos, con 73.400 empleados menos respecto a febrero de 2020. Una caída del 5,5%.

En Estados Unidos, la Oficina de Estadísticas Laborales destacó que el empleo en hostelería está por debajo de su nivel prepandémico en 1,1 millones, un 6,7%. Mientras que en el Reino Unido, la ONS muestra que el sector tiene actualmente un récord de 174.000 puestos de trabajo disponibles y experimenta un 83% más de vacantes que en marzo-mayo de 2019.

La combinación de la inflación y la guerra del sector por el personal lo hace aún peor. Como resultado, los restaurantes necesitan hacer un extra a la hora de subir los salarios para seguir siendo competitivos. En Estados Unidos, la remuneración en 2022 para el sector de la hostelería subió un 8,4% interanual, mientras que la de todos los trabajadores lo hizo en un 4,5%.


¿Restaurantes totalmente robotizados?

No es de extrañar que muchos aboguen por un futuro de restaurantes totalmente automatizados. Hace dos meses, tres ingenieros de Stanford celebraron la gran apertura de Mezli: un restaurante gestionado íntegramente por robots en San Francisco que sirve platos mediterráneos frescos y saludables.

Pero, ¿tienen los clientes de los restaurantes apetito por los robots? No necesariamente. Según el informe de Big Red Rooster, el 75% de los consumidores sigue pensando que la interacción con un empleado es fundamental: la cálida bienvenida, la preparación de la comida o el servicio en la mesa.

Sin embargo, los consumidores son más receptivos a la automatización en lo que respecta a la velocidad y la precisión. Por ejemplo, el 58% afirma que un servicio más rápido es una de las principales ventajas de la automatización, y el 57% cree que implica menos errores.


(Súper)humanos por encima de los robots.

¿Son los robots el futuro de los restaurantes? No. El futuro son los humanos. Los súperhumanos. El cambio de paradigma consiste en seres humanos con súperpoderes. Se trata de elevar el papel de los humanos en los restaurantes aprovechando la tecnología. Y si esto suena futurista, quizá es que te estás quedando atrás.
 

Manolo Bakes.

Hay muchas razones por las que Manolo Bakes es una cadena de cofre&bakery emblemática en España: su café de alta calidad, sus Manolitos -pequeños croissants de delicado hojaldre- y su experiencia divertida.

Manolo Bakes ha ampliado esa experiencia a una relación digital con los clientes a través del "Club MB". La tarjeta de fidelidad del Club MB se puede almacenar en Apple Wallet o Google Pay y simboliza la identidad de Manolo Bakes. Convierte a los clientes en Manolovers premiándolos con Manolos. A medida que ganan Manolos, los clientes reciben recompensas personalizadas.

Y lo que es más importante, el Club MB dota a los empleados de un súperpoder. Obtienen información en tiempo real sobre los Manolovers: su nombre, número de visitas, última visita, preferencias o fecha de nacimiento. Los datos contextuales permiten a los empleados deleitar a los clientes en el momento: saludando su cumpleaños, dándoles una cálida bienvenida cuando los visitan después de un tiempo, o haciendo sugerencias personalizadas basadas en sus preferencias.

Los resultados hablan por sí solos: el Club MB ha multiplicado por tres el número de clientes que regresan en el caso de los miembros activos.

Grosso Napoletano.

Grosso Napoletano está entre las 10 mejores pizzas artesanales del mundo. Pero la experiencia de Grosso mezcla artesanía e innovación, ofreciendo una experiencia digital tan bien elaborada como sus pizzas.

En particular, Grosso Pay ha elevado la experiencia gastronómica. Los clientes de Grosso pueden pagar cuando quieran a través del QR. Ya sea con tarjeta, Apple Pay o Google Pay. Los consumidores también pueden dividir la cuenta, dejar una propina y obtener su recibo digital. Y gracias a la integración nativa con su tarjeta de fidelidad Grosso Squad, Grosso Pay asegura que el cliente sea recompensado sin problemas con el progreso hacia su cuenta de fidelidad.

La adopción ha sido notable: Grosso Pay ha procesado más del 50% de las transacciones en el local en varios locales. Además, ha facilitado considerablemente la vida de los empleados de Grosso. Al ser el principal punto de interacción con el cliente, los camareros de Grosso tienen que ser conscientes de cualquier reto y adaptarse en consecuencia. Minimizar las partes transaccionales del trabajo de un camarero les permite centrarse en establecer relaciones con los clientes, ofrecer un servicio superior y gestionar interacciones más complejas.

Malvón.

Nacida en 2017, Malvón es la cadena de restauración líder en la producción y distribución de empanadas artesanales argentinas, una categoría en auge. Entre España y Portugal, Malvón cuenta con casi 100 locales.

El producto de Malvón es increíblemente adecuado para el reparto y la comida para llevar. Eso les ha llevado a desarrollar su canal de pedidos digitales, ofreciendo experiencias diferenciadas para consumidores y empresas. Su plataforma es un centro inteligente entre mensajeros, pagos, puntos de venta o motores de marketing digital.

Los empleados de Malvón supervisan los tiempos de preparación y controlan el estado de los jinetes o devuelven los pedidos no cumplidos correctamente. En una sola pantalla. Incluso disponen de datos completos sobre el perfil de sus clientes. ¿Se retrasa el rider con uno de sus clientes más fieles? Pueden enviarle un mensaje y compensarle con un regalo personalizado. En un solo clic.


El futuro de los restaurantes.

El futuro de los restaurantes consiste en mantener el toque humano cuando más importa, al tiempo que se aprovecha la eficiencia de la tecnología. Se trata de ofrecer la mejor experiencia tanto a los clientes COMO a los empleados. Y al llevar a cabo este futuro, el sector tiene una excelente oportunidad para atraer el talento y mejorar la cualificación de los empleados, proporcionando atractivas oportunidades de desarrollo en tiempos de escasez de mano de obra.

El futuro de los restaurantes será más humano, no menos. Y será gracias a la tecnología, no a pesar de ella.



Carlos

Co-Fundador